Quería comentar un experimento un tanto... triste digamos, que hicieron hace algún tiempo en una estación de metro de Washington DC.
Propusieron a uno de los violinistas mas famosos del mundo, Joshua Bell, tocar en dicha estación de metro con una cámara oculta para ver la reacción de la gente.
Lo sorprendente (tal vez para algunos) y triste fue que NADIE se paró a excepción de 3 o 4 personas aproximadamente.
Según la noticia, el violinista al finalizar su actuación, consiguió solamente 32 €, cuando al día siguiente o esa misma noche (no recuerdo muy bien) actuó en un teatro de Boston vendiendo todas las entradas. Sin embargo, cuando acabó la actuación en la estación de metro, solo aplaudió una persona como mucho. Los demás estaban demasiado ocupados pensando en su trabajo o en el lugar al que iban.
¿Que quería decir con esta noticia? Pues que la gente no vive. La esclavitud en la que la sociedad vive, está tan normalizada que casi se podría decir que es la gente la que se esclaviza. Os pongo el ejemplo de que por ahí también pasaron padres con sus hijos y por lo visto, los hijos se giraban o se paraban para escucharlo mientras los padres llamaban la atención a sus hijos para que siguieran su camino.
Eso es muy grave. No solo vive la gente en una cárcel, sino que esa gente obliga a sus hijos a entrar poco a poco en sus celdas para al final no poder salir.
Ya no es el sistema el que esclaviza a la sociedad. Es la propia gente que no trata ni de preguntarse si es feliz con su vida. Y los que lo hacen, tampoco le prestan la atención necesaria a tal problema para remediarlo.
Solo quería compartir esto que tenía en la cabeza.
El vídeo:
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